1 de noviembre de 2021.- Ayer falleció en Oviedo nuestro compañero, el arquitecto José Bernabé González Ortega (Pepito de la Vega) a los 87 años de edad.
A continuación reproducimos un texto que le dedica Javier Calzadilla, quien conocía bien a González Ortega:
La muerte de una persona a la que conoces desde hace tiempo te hace regresar de improviso a una época ya lejana, muy lejana; y cuando se trata de alguien como José Bernabé González Ortega, fallecido ayer en Oviedo, ese regreso está acompañado por la tristeza que produce la pérdida de una persona tan entrañable, tan generosa en la ayuda, tan atinada en el consejo solicitado, y tan ejemplar en su trato con las vicisitudes que la vida le deparó.
Cuando al terminar mi carrera regresé a Asturias, Pepe ya llevaba un tiempo ejerciendo su profesión aquí, después de abandonar junto a su mujer, Clarita, la Cuba natal de ambos. Le conocí trabajando en la Delegación del Ministerio de la Vivienda, situada entonces en la calle del Arzobispo Guisasola; y siempre le recuerdo con la palabra adecuada, la indicación precisa y la sonrisa próxima - sobre todo la sonrisa - para quienes a aquellas oficinas nos acercábamos.
Después, nuestro trato se hizo más frecuente por nuestros trabajos como arquitectos – trabajo que él nunca abandonó – y, sobre todo, por su condición de Delegado de la Hermandad Nacional de Arquitectos y la mía de Consejero de la misma; y puedo decir que de esos encuentros, y además de su entrega a aquél cometido, siempre recordaré la sensación de paz con que yo regresaba de ellos. Porque Pepe era, sobre otras cosas y además, una persona transmisora de de eso: paz. Una paz que te regalaba y que era, seguramente, producto de unas profundas creencias religiosas que le hacían estar siempre en paz consigo y en paz con los demás.
Y en paz descansará ahora en ese lugar al que siempre quiso llegar y en el que ya habrá comenzado a disfrutar del descanso eterno.
El funeral se celebrará el martes día 2 de noviembre, a las 13.00 horas, en la iglesia parroquial de San Salvador de Posada de Llanera y, a continuación, sus restos mortales recibirán sepultura en el panteón familiar del cementerio de Cayés. La capilla ardiente se instaló en el tanatorio Los Arenales, Sala n.º 16.
La Junta de Gobierno del COAA quiere expresar a la familia su más sentido pésame.