La asamblea ordinaria de mayo puso plazo a una tarea que el Colegio Oficial de Arquitectos de Asturias tiene pendiente desde hace doce años, cuando al aprobar los estatutos que rigen actualmente la institución, los colegiados incluyeron en ellos la obligación de elaborar un reglamento que reflejara todos los bienes patrimoniales del COAA y reflejara su valor intrínseco. Por diferentes motivos, ese encargo no se había abordado aún, y ya el año pasado también el Consejo Superior de Colegios de Arquitectura de España instó a todos sus miembros a actualizar sus inventarios para garantizar la transparencia y la responsabilidad en su gestión, además de la integridad y la conservación de sus bienes. La asamblea de mayo dio su aprobación al reglamento y puso así en marcha los plazos para la realización de un inventario que debe estar completo, como fecha tope, dentro de un año y medio. De esa manera, antes de que finalice el año 2020 el COAA dispondrá de una lista actualizada de todas las propiedades que debe gestionar y proteger.
El reglamento, elaborado por la junta directiva saliente, llegó ante la asamblea según el procedimiento establecido en los estatutos y sin haber recibido ninguna enmienda durante el tiempo que estuvo a disposición de los colegiados que desearan sugerir correcciones o cambios en su redacción. La anterior decana, Sonia Puente Landázuri, lo presentó como «un texto suficiente, claro, homologable a las propuestas vigentes en otros Colegios y conforme con nuestras necesidades reales». Entre los bienes que, según sus disposiciones, deben aparecer en el inventario se encuentran las dos sedes y todos los locales del COAA, las obras de arte que son propiedad de la institución, los libros y su fondo de publicaciones de interés bibliográfico y cualquier otro elemento que se considere oportuno durante el proceso de catalogación.
