El pasado sábado 7 de enero algunos colegiados estuvimos visitando el poblado minero de Bustiello, exponente por antonomasia del “paternalismo industrial” en nuestra región.
La visita comenzó en el Centro de Interpretación, situado en la que fue una de las casas para ingenieros del poblado de Bustiello. Junto a dos enormes fotografías de conjunto, una original de principios del siglo XX y otra actual, recibimos unas primeras pinceladas generales sobre el significado y alcance de la construcción del poblado.
Después, pudimos contemplar una colección de litografías que representa lo que fue una de las primeras campañas de prevención de riesgos laborales en nuestra región. De gran riqueza plástica y enorme expresividad, estas piezas constituyen una pequeña joya.
A continuación, fue el turno de Antonio López López, primer Marqués de Comillas, y de su hijo Claudio López Bru, promotores de la construcción del poblado, que pretendían se convirtiera en la capital de un nuevo concejo que alojara las explotaciones mineras que la Sociedad Hullera Española, empresa propiedad de su grupo industrial, tenía en la zona.
La planta superior está destinada íntegramente a la arquitectura y urbanismo del conjunto. La creación de terrazas artificiales a distinta altura favorecía el control de los vecinos, cuyas viviendas se ubican pareadas en la terraza inferior, con acceso desde las calles longitudinales y generosas huertas laterales. Las viviendas, de diseño muy cuidado, seguían los modelos europeos de vivienda obrera, proporcionando unas condiciones de vida más que dignas para los estándares de la época.
En la terraza intermedia se situaban las viviendas de los ingenieros, de mayor tamaño y altura. Desde la galería del “chalé principal”, hoy Centro de Interpretación, se controla perfectamente todo el poblado.
La terraza superior, destinada a los poderes fácticos, alberga el “Casino”, sede del Círculo Obrero Católico, en el que se centralizaba el ocio comunitario, siempre bajo estricta vigilancia, y la iglesia, edificio que preside el conjunto y que fue el primero en levantarse. Se trata de una construcción muy curiosa que aúna elementos tradicionales religiosos con otros de corte industrial e incluso de carácter propagandístico, como el altar que simula una galería de mina con elementos iconográficos alusivos a los distintos negocios del grupo empresarial del Marqués de Comillas.
El conjunto se completaba con una escuela para niños situada tras la iglesia, ahora albergue juvenil; y otra para niñas al otro lado del río Aller, junto al antiguo sanatorio, edificio hoy tristemente en ruinas.
En definitiva, una visita amena, entretenida y muy didáctica que os recomendamos.
Poblado Minero de Bustiello (Territorio Museo)
Visita a Bustiello (07/01/2017) (Álbum fotográfico en la página de Facebook del COAA)